GENERAL MOTORS CERRó SUS FáBRICAS EN COLOMBIA Y ECUADOR
Seguirá en esos mercados como importador, pero ya no como productor. La situación en Argentina.
General Motors anunció el cierre definitivo de sus fábricas en Colombia y Ecuador. La empresa que comercializa los autos bajo la marca Chevrolet confirmó que seguirá en esos dos mercados con su red de concesionarios, pero ya no como productor de vehículos, sino sólo como importador.
"Las operaciones de fabricación cesarán en la planta de Colmotores de Colombia y el proceso de desmontaje comienza hoy con un equipo reducido. En la planta de OBB en Ecuador la fabricación cesará a finales de agosto de 2024", informó GM en un comunicado de prensa (ver completo abajo).
"Las acciones que anunciamos hoy son fundamentales para garantizar que estemos mejor posicionados para ofrecer a nuestros clientes los vehículos y las tecnologías más avanzados, e impulsar la transformación de la industria en Colombia y Ecuador hacia un futuro sin emisiones", dijo en ese mismo comunicado el presidente de GM International, Shilpan Amin.
La planta OBB de Ecuador era la automotriz más grande de ese país y producía la pick-up D-Max, una adaptación con emblemas de Chevrolet de la antigua generación de la Isuzu D-Max. La fábrica de Colmotores también era una de las más importantes de Colombia y producía el Chevrolet Joy, un hatchback de entrada a gama que se exportaba a Argentina y Brasil.
GM no brindó precisiones acerca de qué ocurrirá con el Chevrolet Joy en el futuro, aunque en este momento la preocupación está focalizada en los puestos de trabajo que se perderán. En la planta de Colombia trabajaban 850 operarios. La planta de Ecuador, paradójicamente, en diciembre pasado había recibido el premio al "Mejor Lugar para Trabajar" de ese país, en el rubro de manufactura industrial. Ahora cerrará sus puertas y despedirá a todos sus empleados.
Según pudo saber Motor1, al momento de tomarse la decisión en la casa matriz de General Motors en Detroit, se tuvo muy en cuenta el elevado nivel de capacidad ociosa de las dos fábricas. La planta de Colombia estaba operando apenas al 9% de su capacidad instalada, mientras que la de Ecuadro alcanzaba el 13%.
Arriba de todo, el Chevrolet Joy que se fabricaba en la planta de GM en Colombia. Sobre estas líneas, la Chevrolet D-Max que se producía en Ecuadro.
La situación en Argentina
La situación de General Motors Argentina no es auspiciosa. La fábrica de Alvear (Santa Fe) se encuentra en crisis desde hace más de un año. La producción se interrumpe de manera alternada, debido a la falta de piezas. Las autopartistas que abastecen a GM Argentina se endeudaron en dólares el año pasado por consejo del entonces ministro de Economía y candidato a presidente, Sergio Massa. El funcionario les aseguró que les devolvería esos dólares al tipo de cambio oficial del Banco Central, pero esa promesa nunca se cumplió.
El caso de GM Argentina no es el único. Volkswagen Argentina también atraviesa por interrupciones similares y el viernes se anunció también el cierre por una semana de la planta de Stellantis en Córdoba, donde se fabrica el Fiat Cronos. Todo ocurre en medio de una pulseada entre el Gobierno y las fábricas agrupadas en Adefa, que presionan con amenzas de suspensiones para obtener más beneficios impositivos de los que ayer anunció el ministro de Economía, Luis Caputo (ver nota).
Desde diciembre del año pasado, la planta de GM Argentina cesó la producción del Chevrolet Cruze (leer obituario) y hoy está focalizada exclusivamente en la Chevrolet Tracker. Colombia, justamente uno de los mercados donde GM hoy está cerrando su operación industrial, es justamente uno de los principales destinos de exportación de la Tracker argentina.
C.C.
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